· En una jornada simultánea en los departamentos de
Boyacá, Córdoba y Tolima, la Agencia Nacional de Tierras, bajo el liderazgo de
Juan Felipe Harman Ortiz, adelantó la recuperación de predios que alguna vez
estuvieron en manos de estructuras paramilitares.
· En Boyacá, fueron recuperadas tierras que
pertenecieron a los esmeralderos Horacio Triana Romero y Gilberto Rincón, ambos
condenados y extraditados a Estados Unidos por delitos de narcotráfico.
· En Córdoba, los predios estaban bajo el poder del Clan
Castaño, liderado por los hermanos Carlos, Fidel y Vicente Castaño, señalados
responsables de múltiples hechos de violencia y despojo en la región.
En una maratónica jornada
en tres departamentos de Colombia, la Agencia Nacional de Tierras ─ANT─en cabeza de su director
Juan Felipe Harman Ortiz, logró la aprehensión de 1.606 hectáreas de tierra en
los departamentos de Córdoba, Tolima y Boyacá, para devolverlas a manos
campesinas, que alguna vez fueron desplazadas por el conflicto y la violencia.
En total fueron
recuperadas 1.069 hectáreas (ha) enCórdoba, 202 ha en Boyacá y 335 ha en
Tolima, que ahora pasarán al Fondo de Tierras, una herramienta central de la
Reforma Agraria impulsada por el Gobierno Petro.
Los predios fueron
administrados por la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y el Fondo de
Reparación para las Víctimas, y posteriormente fueron transferidos a la ANT.
Con ello, se garantiza que los bienes producto del despojo y la guerra cumplan
su verdadera función social: volver al servicio del campesinado y contribuir a
la reparación colectiva.
Recuperaciones en Boyacá
En el municipio de
Maripí, Boyacá, la Agencia Nacional de Tierras, en coordinación con la Policía
Nacional, logró recuperar 202 hectáreas que habían estado en manos de los
esmeralderos Horacio Triana Romero y Gilberto Rincón, ambos condenados por
delitos relacionados con el narcotráfico.
Estos predios,
ubicados en el occidente boyacense, fueron durante años símbolo del poder
ilegal que ejercieron figuras del negocio de las esmeraldas. Entre los antiguos
propietarios figuran Gilberto Rincón Castillo, exconcejal de Maripí y hermano
de Pedro Nel Rincón Castillo, conocido como Pedro Orejas, capturado en 2017 y
condenado en Estados Unidos por narcotráfico, y Horacio de Jesús Triana, el
llamado Zar de las esmeraldas,también sentenciado por el delito de
tráfico de drogas.
En total nueve predios,
El Capotal, La Hacienda, La Belleza, La Laguna, Llano Grande, Barro Blanco, El
Guadal, El Palmar y El Achote, que estaban bajo administración de la SAE por
ser bienes de extinción de dominio, se convierten en símbolos de paz y un nuevo
renacer para162 familias de la Asociación Paz y Progreso de Mapirí
y la Asociación Agropecuaria El Porvenir, campesinos cacaoteros y cultivadores
de caña del occidente del Tolima.
José Ruperto Olmos, representante de la Asociación Campesina Paz y
Progreso (Asocapaz) del municipio de Maripí,
destacó que las 30 familias que integran esta
organización hoy tienen la oportunidad de trabajar y producir en
tierras propias, gracias al respaldo del Gobierno
del presidente Gustavo Petro y la Agencia
Nacional de Tierras.
“Por fin estas
tierras pasan a nuestras manos ydejan atrás ese pasado oscuro. Estamos listos
para hacerlas producir, convertirlas en sustento para nuestras familias y en
motor del progreso de nuestra asociación. Estas tierras representan esperanza y
estabilidad para nuestros hijos y nietos, quienes también serán parte de este
gran proyecto de Reforma Agraria”, expresó Olmos con emoción.
A su turno, Orlando
Forero, presidente de la Asociación Agropecuaria El Porvenir de Maripí, afirmó
“hemos estado esperando esta oportunidad durante muchos años y hoy se hace
realidad.Aquí vamos a sembrar maíz, plátano, frutales y también esperanza,
porque lo que nace de nuestras manos alimenta al país. Gracias a la Agencia
Nacional de Tierras por creer en nosotros y en el campo colombiano”.
Cada hectárea, un paso hacia
la paz
Cada hectárea recuperada
representa una deuda saldada con los campesinos y víctimas del despojo, una
respuesta concreta a la violencia y una garantía de no repetición. Con estas
jornadas, la Agencia Nacional de Tierras sigue cumpliendo su compromiso de
recuperar y proteger los bienes públicos de la nación, a fin de garantizar que
ninguna estructura ilegal vuelva a apropiarse de los terrenos que le pertenecen
al campesinado colombiano.
Este proceso de
recuperación refuerza la presencia del Gobierno nacional en regiones donde,
durante años, el Estado fue reemplazado por la violencia y el miedo. De esta
manera, el presidente Gustavo Petro, con el compromiso decidido de la ANT,
demuestra que la Reforma Agraria no es una promesa, sino una realidad que se
construye con hechos. La tierra que alguna vez fue símbolo del terror, hoy
florece como símbolo de reparación, memoria y dignidad para el campesinado
colombiano.